¿Sabes por qué amas como lo haces? (2) Todo sobre el apego adulto

¿Vives tus relaciones desde el amor o desde el dolor? La respuesta dependerá en gran medida del tipo de apego adulto que has desarrollado. El tipo de apego, la manera como te relacionas como adulto, depende de los vínculos que has tenido en la infancia, en especial con tu figura materna (o cuidador) como lo vimos en la entrada ¿Sabes por qué amas como lo haces? (1) Aquí puede estar la clave.

Al final de los 80´s, Cindy Hazan y Phillip Shaver ampliaron los estudios y teorías de Bowlby sobre la teoría del apego a las relaciones afectivas adultas.

Para Bowlby el apego es un vínculo afectivo que estableces con otra persona a la que consideras importante para tu bienestar físico y psicológico. Está caracterizado por la necesidad de proximidad física y emocional.

Si el vínculo del apego lo formas de manera adecuada aparece la seguridad en que la otra persona no te va a fallar ni a abandonarte, y la creencia en que el otro tiene la capacidad de protegerte, cuidarte y ayudarte.

De acuerdo a las diferentes experiencias de apego vividas con las figuras más centrales en tu vida y las de la primera infancia, habrás formado un patrón o estilo de apego caracterizado por una manera de relacionarte, sentir y pensar. Este estilo influirá en todas tus relaciones de apego.

Para hablar de los estilos de apego adulto me remitiré al texto Apego y sexualidad. Entre el vínculo afectivo y el deseo sexual de Javier Gómez Zapiain ya sabes donde ampliar la información al respecto.

Estilo de apego seguro

Los adultos con apego seguro tienen una visión positiva de sí mismos, sus parejas y sus relaciones. Se sienten cómodos con la intimidad y la independencia, equilibrando los dos. Algunas afirmaciones de una persona con apego seguro podrían ser:

me es relativamente fácil estar unido a algunas personas;
me encuentro bien dependiendo de otros y aceptando que otros dependan de mi;
no me preocupa el miedo a que los demás me abandonen;
no me inquieta que alguien esté demasiado unido a mi.

Se asocia con relaciones confiadas y positivas. Sus características principales son:

Tienen más capacidad para vivir solas de forma constructiva si no encuentran razones para formar pareja.
Pueden seleccionar mejor la pareja porque suelen tener mejores habilidades sociales, estando menos apremiados por la necesidad de no estar solos.
Tienen la capacidad de decidirse a formar pareja, vivir la intimidad y establecer compromisos de manera segura y confiada
Sus ideas sobre el amor son realistas pero positivas. Consideran que es posible vivir en pareja pero siempre y cuando sea de forma satisfactoria.
Mayor facilidad para la intimidad y el compromiso al vivir en pareja.
Si tienen razones para romper, lo hacen con más facilidad que los ansiosos y de manera más adecuada que los evitativos; aunque pasan por periodos de profundo dolor, rehacen mejor su vida.

«Amar es el arte de querer a la otra persona como realmente quiere ser querida, no tanto como uno quiere querer” Erich Fromm

Estilo de apego ansioso o ambivalente

Los adultos preocupados-ansiosos buscan altos niveles de intimidad, aprobación y respuesta de la pareja, volviéndose excesivamente dependientes. Ellos tienden a ser menos confiados, tienen una visión menos positiva de sí mismos y de sus parejas, y pueden presentar altos niveles de expresividad emocional, preocupación e impulsividad en sus relaciones.

Algunas afirmaciones de una persona con apego ansioso o ambivalente podrían ser:

yo encuentro que los otros son reacios a unirse a mi tanto como yo quisiera;
frecuentemente estoy preocupado porque temo que mis parejas no me amen totalmente o no deseen estar conmigo;
deseo unirme completamente a otra persona y este deseo parece ahuyentar a la gente lejos de mi;
yo me entrego totalmente pero nunca encuentro alguien que sepa amarme como debe ser.

Se asocia a relaciones dependientes y a una continua necesidad de confirmación de que se es amado. Sus características principales son:

Se sienten inseguras e inestables en general.
Soportan mal la soledad y tienen dificultades para construirse una vida sin pareja.
Buscan y elije pareja de manera precipitada por su estado de inseguridad y ansiedad.
Una vez establecida la relación tienen mucho miedo a ser abandonadas. Se sienten inseguras y necesitan que les confirmen continuamente que se las quiere.
El miedo al abandono y la inseguridad favorecen los celos infundados.
Consideran que las relaciones amorosas son los más importante de la vida, pero que pocas veces se consigue la relación adecuada.
Es frecuente que piensen que ellas son muy capaces de entregarse y que nunca encuentran a la persona que se merecen.
Tienen mucha dificultad para romper una relación aunque estén convencidas que deben hacerlo, porque les da mucho miedo la soledad.

Estilo de apego evitativos (desapegados-miedosos)

Los adultos evitativos desean un alto nivel de independencia, muchas veces evitando el apego por completo. Ellos se ven a sí mismos como autosuficientes, invulnerables a los sentimientos de apego y sin necesidad de relaciones cercanas. Tienden a reprimir sus sentimientos distanciándose de sus parejas de quien por lo general tienen una visión negativa.

Algunas afirmaciones de una persona con apego desapegados-evitativos- miedosos podrían ser:

estoy algo incómodo en las relaciones íntimas con los demás;
encuentro que es difícil confiar en las personas plenamente;
no puedo permitirme a mi mismo depender de otros;
estoy nervioso cuando alguien intima demasiado conmigo;
con frecuencia mis parejas desean que yo intime más con ellos del grado de intimidad que me resulta cómodo a mi.

El estilo de apego evitativo: tiene que ver con relaciones desconfiadas y distantes. Sus características son:

Tienen una aparente capacidad de estar solas, pero se trata de una falsa autonomía defensiva.
Temen la intimidad emocional. La expresión de las emociones, la comunicación de asuntos muy personales, la intimidad corporal a veces, etc., les crea incomodidad y malestar.
Prefieren relaciones más formales y distantes, incluso con la pareja. Las relaciones tienden a ser frías.
Les cuesta mucho tomar la decisión de formar una pareja, porque pueden percibirlo como una amenaza a su propia intimidad.
Les cuesta manifestar sus sentimientos y afectos y les crea malestar el que lo haga su pareja.
Tienden a pensar que las relaciones amorosas no existen realmente, son cosas del cine y la literatura.
Toman decisiones de forma aparentemente fácil en el caso en que tengan razones para romper.

Apego adulto, grado de dependencia y evitación

De acuerdo al grado de dependencia y de evitación que se presenta en la persona, se describen los siguientes tipos de vinculación:

Seguro: persona que siente bienestar con la intimidad y la autonomia. Se caracteriza por un bajo nivel de dependencia y de evitación.
Evitativo alejado o ausente: persona que niega la necesidad de apego mostrándose muy evitativa. Muestra una autosuficiencia defensiva, no cree en las necesidades afectivas. Posee un bajo nivel de dependencia y un alto nivel de evitación.
Preocupado: persona que tiende a mantener relaciones ansiosas y ambivalentes en situaciones de proximidad, en general muy dependiente. Se caracteriza por un alto nivel de dependencia y un bajo nivel de evitación.
Evitativo miedoso: persona que evita la relación porque teme la intimidad. Reconoce que necesita de los demás, pero le aterra la proximidad. Posee un alto nivel de dependencia y un alto nivel de evitación.

¿Has podido identificar cuál es el tipo de apego que predomina en tus relaciones afectivas? Seguramente comprenderás mejor ahora tu manera de vincularte.

.TesHaz

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