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Cómo ayudar a una persona con ansiedad: Guía práctica con sencillas estrategias

Tabla de contenidos

La ansiedad es una respuesta natural de nuestro cuerpo frente al estrés, y cuando se convierte en un trastorno, puede interferir significativamente en la vida diaria. Ayudar a una persona con ansiedad no significa eliminar su malestar de inmediato, sino ser un apoyo efectivo durante los momentos más desafiantes. Esta entrada explora qué puedes hacer para ayudar a alguien que enfrenta esta lucha.

Qué es la ansiedad y cómo afecta a las personas

En consulta siempre les digo que la ansiedad es como una ola. En su punto más alto, cuando la persona está en la cresta, parece imposible controlar la sensación de pánico, miedo o incomodidad extrema, realmente sienten que se van a morir. Es importante entender que, en ese momento, la persona no puede «apagar» su ansiedad por completo. Sin embargo, cuando la ola empieza a formarse, es posible trabajar en estrategias para mitigar su impacto.

Los síntomas de la ansiedad pueden incluir respiración rápida, sudoración, mareo, pensamientos acelerados e incluso una sensación de pérdida de control. Para quienes observan desde afuera, puede ser difícil comprender lo que ocurre, por eso mismo aprender a ser un apoyo eficaz es crucial.

El papel de la persona cercana: lo que no debes hacer

Muchas veces, las intenciones de ayudar pueden ser contraproducentes. Evitar estas conductas puede marcar la diferencia:

  • No minimices sus sentimientos: Frases como «no pasa nada», «échale ganas», «cuando quieras dejarás de sentirte así» o «todo está en tu cabeza» pueden hacer que la persona sienta que su experiencia no es válida.
  • No intentes ser terapeuta: No necesitas «resolver» el problema, simplemente estar ahí puede ser suficiente.
  • Evita presionarle para que se calme: Pedirle que se tranquilice sin ofrecer herramientas o apoyo real puede aumentar su frustración.

Cómo ser un apoyo efectivo: técnicas y estretegias

Mantén la calma y sé un ancla

La ansiedad (como estado de ánimo que también es) puede ser contagiosa, por lo que mantener la calma es esencial. Como alguien cercano, puedes ser la persona que brinda estabilidad cuando todo parece estar fuera de control.

«Mantener la calma y estar a su lado puede ser suficiente. Hazle saber que estás ahí y que no tiene que enfrentarse en soledad a la ola.»

Ayúdale a recuperar su enfoque con técnicas simples

Algunas estrategias que puedes sugerir:

  • Respiración controlada: Invita a la persona a inhalar lentamente por la nariz y exhalar por la boca. Tienes múltiples videos en mi canal de Yotubre sobre respiración consciente. También tienes Mindfulness para adultos. 8 prácticas guiadas que te ayudarán a encontrar la paz Interior
  • Usa una bolsa de papel: Si está hiperventilando, esto puede ayudar a equilibrar los niveles de dióxido de carbono en su cuerpo.
  • Pregunta qué necesita: Puede ser algo tan simple como un vaso de agua o espacio personal.

Evita asumir lo que necesita; cada persona es diferente, y lo mejor es preguntar directamente.

La importancia del entrenamiento previo: respiración y atención plena

Cuando la ola aún no llega, existen estrategias que pueden ayudar a gestionar la ansiedad a largo plazo. Técnicas como la respiración consciente y la atención plena son esenciales.

Cuando la ansiedad comienza, el entrenamiento en ejercicios de respiración y observación puede marcar la diferencia. Sin embargo, esta preparación depende únicamente de la persona que la experimenta.

Recomienda prácticas como:

Infografía titulada "7 estrategias para ayudar a alguien con ansiedad", detallando pasos como identificar síntomas, ofrecer tranquilidad y buscar ayuda profesional, con íconos para cada paso.

Cómo prepararse para el futuro: recursos y estrategias de largo plazo

Además de las acciones inmediatas, ayudar a alguien con ansiedad también implica apoyarle en la búsqueda de recursos profesionales.

Estrategias adicionales:

  • Crear un plan de acción: Creen juntos un protocolo para manejar episodios agudos de ansiedad.
  • Acompañamiento en actividades relajantes: Caminar, pintar o escuchar música juntos puede ser terapéutico.

Ayudar a alguien con ansiedad no se trata de «arreglar» el problema, sino de ser un apoyo constante y comprensivo. Desde mantener la calma hasta practicar técnicas simples de respiración juntos, hay muchas maneras de marcar una diferencia positiva. Como en toda relación, escuchar, preguntar y adaptarse a las necesidades específicas de la persona es fundamental.

Las herramientas más efectivas surgen del entendimiento y la empatía. Enfrentar la ansiedad es un desafío, pero con el apoyo adecuado, es posible transitar este camino con mayor seguridad y esperanza.

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